Después de haberme gastado ese
dineral y haber superado las críticas de mis familiares por comprarme un “juguete”
de semejante precio puedo decir que ha merecido la pena haberlo comprado.
Estos juguetes para adultos
pueden parecer un poco caros, pero si divides su precio entre las horas de uso
su relación €/hora es irrisoria, y si añades el factor diversión al mes ya no
te acuerdas lo que te costo.
Los precios varían bastante, dependen de la calidad que busques, un volante bueno es obligatorio que tenga la opción de usar 900º y FF (Force feedback), a partir de ahí existen mil combinaciones, pero eso es lo básico. Partiendo de esas dos obligaciones podemos encontrar desde unos 250€ los Logitech G27, por unos 380€ el Thrustmaster T500 RS y más arriba aún por 600€ tenemos el Fanatec CSR elite.
La mayoría vienen con pedales y palanca de cambios que son necesarios para jugar, luego como opción hay gente que se monta un auténtico habitáculo casero o compra un playseat con baquet incluido (Incluso hay playseats con simulación de fuerzas G). Se puede recurrir también al mercado de segunda mano, aunque hay que tener ojo y valorar posibles caídas o desperfectos que alteren el funcionamiento, he estado ojeando y los míticos G25 rondan los 160€, un precio que merece la pena pagar por quemarse un rato cada día.