Prueba: Think City, coche eléctrico

Gracias a Zero Vehículos eléctricos pude probar el Think City, el  primer automóvil eléctrico que se puso a la venta en España, Zero puso un stand con todos sus vehículos en el centro comercial Ferial Plaza de Guadalajara, allí se podían ver varios vehículos eléctricos, desde bicicletas hasta coches, y se podía solicitar la prueba de estos vehículos (también se puede visitar su tienda, Calle Virgen de la Soledad,16, Guadalajara, www.zerovehículoseléctricos.es).

Nunca había conducido un coche eléctrico, pero sí una moto, por lo tanto me hacía una idea de cómo funcionan. Por fuera es un coche pequeño, del segmento B, utilitarios, tiene un diseño bastante corriente, es decir que al verlo nada da pie a pensar que es un coche eléctrico (excepto que no tiene tubo de escape).  Por dentro casi todo es como en cualquier coche, lo diferente es el tablero de instrumentos, donde no se ven indicadores de temperatura, gasolina o tacómetro para indicar las RPM; en su lugar hay indicadores del nivel de la batería y del uso que se hace en todo momento de esta (potenciómetro), lo que permanece igual es el velocímetro. El coche es automático, y en esto también es casi igual a los demás, vuelvo a decir casi porque las posiciones son algo diferentes, tiene todas las normales (PRND) más una que es E, el modo económico, en el que el coche se retiene al no acelerar. Este modo es muy cómodo al conducir en ciudad, apenas hace falta pisar el freno, el coche nunca se embala. Para trayectos fuera de ciudad está la posición D. 

Una de las características de los coches eléctricos es que son silenciosos, al principio es extraño que al arrancarlo no suene nada, simplemente se gira la llave y ya está listo para  circular. Al rodar no hace ruido, sólo el de las ruedas en contacto con el asfalto y un ligero zumbido de la batería, es raro al principio pero rápidamente uno se acostumbra a ello. Otra particularidad de estos coches es su respuesta, que es inmediata.  En el Think lo pude comprobar, en cuesta arriba bastó con acelerar un poco para notar mucho empuje, y desde parado ya tenía toda la fuerza disponible (140Nm), su motor produce 34kW, el equivalente a 45cv. Es muy cómodo que en la posición E el coche se retenga, en cuesta abajo se nota bastante, no se embala. En la posición D esto cambia, el coche deja de retener, cuando más retiene menos batería se gasta, así que cuanto menos se frene más autonomía tendrá. Los frenos van muy bien, son más que suficientes para este coche. 

El Think es muy cómodo: acelerar, frenar y no gastar apenas nada. Está pensado para la ciudad (como su nombre indica) donde su autonomía es mayor, su batería se agota antes en carretera, al contrario que los coches normales, los eléctricos “consumen” menos en ciudad. Está destinado a ser un segundo coche, no se  pude viajar con él porque su autonomía no permite hacer largos recorridos, pero para usarlo en ciudad es una muy buena opción. Su autonomía es de 160km en ciclo mixto o 220km en ciclo urbano; se tarda en cargar entre 8 y 11 horas, dependiendo de las baterías que lleve (ión-litio o níquel-sodio, las primeras son para un uso normal, y las segundas para un uso algo más duro), se recarga en cualquier enchufe. Se puede sacar a la carretera, pero su velocidad máxima son 110 km/h, para desplazamientos cortos puede valer, pero nada más. El Think tiene dos plazas, el maletero es amplio, pero a partir de este mes estará disponible con cuatro plazas, y con menos maletero por lo tanto. Su precio es su gran lastre, cuesta en torno a 28000€, aplicando ya el IVA y la ayuda del plan MOVELE (unos 7000€ a coches eléctricos). Las baterías tienen una vida útil de unos 230000km. Los gastos que conlleva este coche son el mantenimiento de los frenos, las ruedas y los limpiaparabrisas.

Imágen www.sobrecoches.com

Poco a poco los coches eléctricos se están empezando a vender, en nuestro mercado ya hay varios, el noruego Think City, Nissan Leaf (se empezará a vender en Agosto), Tesla Roadster, dentro de poco el Mitsubishi i MiEV, Citröen C-Zero y Peugeot iOn, estos tres últimos hermanos, y una gama de coches eléctricos de Renault. El precio de estos coches ahora es muy alto, pero a medida que tengan más demanda serán más baratos, además tienen que desarrollarse más, su autonomía tiene que mejorar. El público tiene que conocer más el tema de los eléctricos, ya que la gente sabe muy poco, o nada, sobre estos coches. Se dice que los eléctricos son coches aburridos, sin embargo algunas grandes marcas están haciendo lo posible por demostrar lo contrario, Mercedes o Audi están desarrollando supercoches eléctricos, como el SLS E-CELL o el R8 E-Tron.  Dentro de poco será bastante normal ver coches eléctricos por nuestras calles, son muchas sus ventajas, aunque no sé si alguna vez conseguirán transmitirnos las mismas sensaciones que los coches con motor de gasolina (muy probablemente no lo hagan...), claro, que sin duda serán más limpios y se supone que más económicos…